
HORIZONTES DE FE
Entra en un viaje transformador hacia la vida espiritual plena. Descubre verdades profundas y aplicables que darán nueva luz a tu caminar en Cristo, como dice Salmos 119:105, “Lámpara es an mis pies tu palabra.”
"Si tienes hambre de una fe auténtica que impacte cada aspecto de tu vida, acompáñame en este sendero donde la sabiduría bíblica se convierte en una guía viva y poderosa. Descubre un camino de crecimiento espiritual que no solo ilumina, sino que también transforma." Pastor Orlando.
Si estás en El Paso, te invitamos a unirte en persona con el Pastor Orlando cada domingo a la 1 pm en eGlesia Casa de Adoración, ubicada en 801 N. Mesa St. También puedes conectarte con nosotros en línea en https://pastororlando.org. Para más información, contáctanos al (915) 314-5050 o envíanos un correo a pastororlando@pastororlando.org.
HORIZONTES DE FE
¿Chapoteando o buceando?
Envía un mensaje al Pastor Orlando
Pastora Mireya "El camino hacia la madurez espiritual no es instantáneo sino progresivo, tal como nos revela la poderosa visión del río en Ezequiel. Este mensaje nos sumerge en una fascinante exploración de los cuatro niveles de profundidad espiritual que todo creyente está llamado a experimentar.
Atrévete a examinar tu vida espiritual y pregúntate: ¿dónde estoy? Y más importante aún: ¿qué necesito soltar para avanzar al siguiente nivel?
-Para oración o bienestar espiritual escriba a: pastororlando@pastororlando.org.
-En USA, llame al +1 915-314-5050.
-Hay mas recursos espirituales en: https://pastororlando.org.
-Visitanos en Casa de Adoración, 801 Mesa St. El Paso, TX. Domingos a la 1pm.
-Para sostener nuestro ministerio:
*Por Zelle: pastororlando@pastororlando.org
*Via CashApp: eglesia801
*En el Banco de America, Cuenta de Eglesia Casa de Adoración, Fe & Evangelización Incorporated.
*Cheques. Enviar a Eglesia Inc. P.O BOX 963533, El Paso TX 79928.
Ahora veamos lo que dice Lucas.
Speaker 1:Si quiere, usted vaya apuntando para que yo lo voy leyendo. Lucas, capítulo 9, del verso 29 al 28. Ese es el momento de la transfiguración. Monte alto para orar y ahí pueden experimentar la transfiguración de Cristo. No lo hizo en el lugar donde estaban, los tuvo que mover para que ellos pudieran experimentar. Algo que a mí me llama también la atención, es algo que pasa en Juan 20. Usted apunte, hay muchos versículos para que usted después vaya haciéndolo un poquito más despacio. Juan 20, le voy a leer del verso 1 al verso 8.
Speaker 1:El primer día de la semana, maría Magdalena fue de mañana, siendo aún oscuro, al sepulcro y vio quitada la piedra de sepulcro. Entonces corrió y fue a Simón Pedro y al otro discípulo, aquel al que amaba Jesús, estamos hablando de Juan Y les dijo se han llevado del sepulcro al Señor y no sabemos dónde lo han puesto. Y salieron, pedro y el otro discípulo ¿Quién era Juan? Y fueron al sepulcro. Corrían los dos juntos, pero el otro discípulo corrió más a prisa que Pedro y llegó al sepulcro. Bajándose a mirar, vio los lienzos puestos allí, pero no entró. Luego Simón Pedro, tras él, entró en el sepulcro y vio los lienzos puestos allí. Entró en el sepulcro y vio los lienzos puestos allí y el sudario que había estado sobre la cabeza de Jesús, no puestos con los lienzos sino enrollado en un lugar aparte. Entonces también entró el otro discípulo ¿Quién era? Juan? que había venido primero al sepulcro. Él llegó primero, pero no había entrado, dice. Entonces entró también el otro discípulo que había venido primero al sepulcro y vio y creyó Nosotros podemos estar en el lugar correcto, pero si no nos movemos, no nos acercamos, no vamos a poder ver lo que Dios tiene para nuestras vidas.
Speaker 1:Por eso Dios nos tiene que mover y esto fue lo que hizo con Ezequiel. Para que Ezequiel pudiera ver la visión completa, lo tuvo que mover Y nosotros quizás estamos muy cómodos en una iglesia haciendo muchas cosas, pero hemos tomado ya como ya nos sentimos seguros, confiados. Pero a veces Dios tiene que movernos, nos impulsa a movernos para que podamos observar qué es. Lo vamos a encontrar En su presencia. Dios nos invita a acercarnos, a explorrarnos que su espíritu está fluyendo mucho más allá de lo que nosotros vemos Y solamente estamos acostumbrados a mirar en este pedacito. Dios tiene algo más grande para nosotros, así que vemos que Ezequiel tuvo que dar la vuelta al templo para ver el agua fluir. A veces nosotros también necesitamos movernos para ver el mover de Dios en nuestras vidas. A veces ya nos acostumbramos tanto en un lugar que ni siquiera nos estamos dando cuenta de cómo Dios nos está bendiciendo, porque ya estamos acostumbrados ahí. Entonces el Señor nos necesita mover un poquito, ¿verdad? nos está invitando a mover. Ahora veamos lo que dice el versículo 3.
Speaker 1:Al versículo 5 dice y salió el varón hacia el oriente llevando un cordel en su mano y midió mil codos y me hizo pasar por las aguas hasta los tobillos. Midió otros mil y me hizo pasar por las aguas hasta las rodillas. Midió otros mil y me hizo pasar por las aguas hasta los lomos. Midió otros mil y ya era un río que ya no se podía pasar, porque las aguas habían crecido de manera que el río no se podía pasar sino a nada.
Speaker 1:Vemos que el ángel mide cuatro veces la distancia de mil Y en cada tramo que va midiendo va aumentando el nivel. El primero era tobillos, la segunda vez rodillas, la siguiente vez hasta los lomos, cintura, ¿verdad? Y la última vez dice que ya no se podía pasar, se tenía que cruzar a nados. Entonces aquí vemos una progresividad de crecimiento espiritual. Uno no nace maduro, ¿verdad? Uno, cuando llega a los pies de cristo, no lo sabe todo, un bebecito que apenas está empezando a conocer. Así que ese río simboliza el proceso de profundización, de profundización con dios. Este río nos está invitando a entrar, a entrar.
Speaker 1:Cada nivel va a representar un grado de entrega, ¿verdad? El número de mil es como un símbolo de plenitud de proceso. Ya terminaste este procesoío no es simplemente un cambio físico de nivel de agua, sino es una transformación espiritual más profunda, más completa, ¿verdad? Cada mil codos que avanzamos, el primero decíamos, vemos que llega a los tobillos.
Speaker 1:Cuando nosotros cruzamos el umbral, reconocemos a Jesús como el Señor. ¿a dónde? creen que tenemos el agua? En los tobillos? ¿verdad? Entonces eso significa que estamos empezando un inicio de relación con Jesús, con Dios.
Speaker 1:Es cuando hemos creído, nos hemos acercado a la iglesia, hemos comenzado a conocer la palabra, pero todavía es superficial. Y vemos lo que dice Hebreos 6.1. Dejando ya los rudimentos de la doctrina de Cristo, vamos adelante a la perfección, ¿verdad? Y Hebreos 5.13 dice y todo aquel que participa de la leche es inexperto en la palabra de justicia porque es niño todavía. Así que todavía esa persona que está recién llegada a la iglesia es un niño, ¿verdad?
Speaker 1:Así que un niño recién llegado a la iglesia es un niño que tiene muchas preguntas y es muy curioso, tiene un deseo de conocer a Dios, pero no se quiere comprometer todavía. Hay algunos que dicen espérate que yo conozco un poquito más. Y si le decimos no, pues que va a haber autismo Espérame, dame un poquito más, ¿verdad? Así que ese es el nivel de tobillos. Su vida cristiana está basada en emociones. Si me siento feliz, voy a la iglesia Y si me siento triste, no es que me amanecí, me dolió la cabeza, amanecí triste. Hoy no voy, ¿verdad? Pero vamos al segundo nivel, el nivel de rodillas.
Speaker 1:En este nivel las rodillas indican oración, dependencia. Reconocemos que no podemos hacer las cosas, solo reconocemos que necesitamos a Dios. Yo quiero pensar que usted ya se va midiendo. Si ya va por las rodillas, o usted se quedó en los tobillos, ¿verdad? O sea que empiece a vislumbrar. Dice se va a vislumbrar Y entonces dice Efesios 3.14, por esta causa doblo mis rodillas ante el Padre, porque reconozco que yo no puedo hacer las cosas, solo que necesito de Dios.
Speaker 1:Daniel, vemos la vida de Daniel en el capítulo 6, dice que él oraba de rodillas. ¿cuántas veces? Tres veces al día. Dice que él oraba de rodillas. ¿cuántas veces, consciente de la necesidad espiritual que hay en su vida, empieza a ser más consciente que necesita de Dios para avanzar En este nivel.
Speaker 1:Nosotros empezamos a orar con un poquito más de constancia, aunque tengamos inseguridad, pero oramos En este nivel. Empezamos quizás a participar en grupos de oración, aunque digamos no sé orar muy bien, pero si me ponen, yo lo hago. Ya, hay un poquito poquito más de compromiso. En este nivel. Empezamos a poner todas las cosas que planeamos para nuestra vida en las manos de Dios. Ya, no tomamos decisiones locamente, sino decimos Señor, si es tu voluntad, pongo esta situación que yo pueda avanzar, ¿verdad? Pero llegamos al siguiente nivel, el nivel de la cintura. La cintura es el símbolo de equilibrio y control. Aquí la cintura, o los lomos, ¿verdad? También se usa para referirse donde nacen las decisiones importantes.
Speaker 1:En este nivel, el creyente ha rendido muchas áreas al Señor. Ya, cuando tú estás en esta área, ya ha rendido muchas áreas, pero todavía tienes cierto control porque todavía puedes caminar, ¿verdad? Es más, tú métete a una piscina y si te llega hasta la cintura, tú todavía puedes caminar, tú todavía tienes control para dónde quiero ir, si me quiero salir, si quiero ir más profundo. Claro que si no sé nadar nada más, a lo mejor hasta ahí quiero llegar, ¿verdad?
Speaker 1:Entonces, en este nivel todavía hay control. Le he rendido muchas áreas al Señor, pero todavía yo tengo control. Dios me guía, pero todavía tengo muchas luchas internas. ¿será que lo hago, dios? Ay, pero me gusta. ¿será que está mal que haga yo aquello? Pero yo creo que no, todavía, aunque sabemos algunas cosas de la palabra, a veces, como que omitimos. Omitimos, yo creo que si me tomo una no está mal, ¿verdad? Porque la Biblia dice poquito vino, ¿verdad?
Speaker 1:Entonces todavía nosotros controlamos nuestras emociones, nuestros deseos o nuestras decisiones. En esta etapa hay un crecimiento en el dominio propio, en nuestro carácter, en nuestra obediencia. En nuestro carácter, en nuestra obediencia, ya, no solo oro porque tengo una necesidad, sino oro porque es mi deseo pasar tiempo con Dios, dice Efesios 6, 14. Estad pues firmes, ceñidos vuestros lomos con la verdad. ¿qué están ceñidos Los lomos? La armadura espiritual comienza por ceñirse los lomos con la verdad, que es la palabra de Dios.
Speaker 1:Entonces esto trae convicción y trae obediencia a nuestras vidas. Trae convicción y trae obediencia a nuestras vidas. Aquí, en este nivel, empezamos a ver frutos visibles de obediencia. Empezamos a ver lo que dice Gálatas 5, 22 al 23,.
Speaker 1:Más el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre y dominio propio. Empezamos a vencer hábitos y deseos que antes no podíamos dominar. Ya tenemos más control. Empezamos a servir en la iglesia o en un ministerio con más perseverancia. A mí no me importa si van cuatro, si no va nadie, yo voy a ir. Yo me estoy comprometido con Dios Y en este nivel yo ya puedo perdonar con facilidad. No importa que me hagan caras, que me digan yo ya vencí en esta área. Yo ya vencí en esta área. Y entonces yo ya tengo una convicción cuáles son aquellas cosas o aquellas relaciones que son tóxicas o nocivas para mi vida cristiana. Y yo digo no más. No importa quién sea ni lo que sea, yo ya tomo control. Yo ya tengo más control En esta etapa de mi vida.
Speaker 1:Yo puedo leer y aplicar más fácilmente la palabra. Ya no tengo que andar diciéndole a una u otra persona que me explique. Yo ya entiendo, he tenido tanto tiempo con Dios que ya empiezo a conocer lo que Dios quiere para mi vida. Pero aún falta un nivel más, y es el nivel de las aguas profundas. Es el nivel donde hay una entrega total y un fluir constante del Espíritu Santo en mi vida. Es donde ya no hay un control humano. Yo ya no decido a dónde quiero ir ni lo que quiero hacer, sino es el Espíritu Santo moviéndose en mi vida.
Speaker 1:En esta etapa, la persona se rinde completamente a Dios y a su plan eterno. Ya no vivo para mí, vivo para Él, vivo para su gloria, vivo para los planes que Él tiene para mí. En este veamos lo que dice Romanos 8, 14. Porque todos los que son guiados por el Espíritu, estos son hijos de Dios. Juan 3, 8. El viento sopla de donde quiere. Así es todo aquel que es nacido del Espíritu.
Speaker 1:Gálatas 2.20,. Ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí. Entonces, en este punto de mi vida, en esta etapa, en esta nueva estación de mi vida, el Espíritu Santo me guía. En cada área de mi vida Hay una confianza radical porque ya no me obedezco, lo obedezco A donde Él me lleve. Yo voy a estar bien, yo voy a estar seguro porque estoy haciendo la voluntad de Dios. Aunque no lo entienda, lo obedezco.
Speaker 1:En este nivel nuestras decisiones no se toman nada más porque sí, siempre consulto a Dios, siempre dejo que Él determine si debo avanzar, debo retroceder, debo cambiar de dirección. Es más, leímos un pasaje que en Juan 3.8 dice el viento sopla de donde quiere, así es todo aquel que es nacido del Espíritu. Es decir, dios te lleva a donde Él quiere. A donde Él quiere. Entonces nuestra meta es que podamos decir lo que dice Gálatas 2.20. Con Cristo estoy juntamente, crucificado, y ya no vivo yo más. Cristo vive en mí. Es decir, yo me voy a mover como Él quiere, como su Espíritu Santo me ayude y me guía.
Speaker 1:Entonces, si en esta tarde nos pudiéramos hacer unas preguntas sería ¿desde dónde fluye mi vida espiritual?
Speaker 1:¿Desde los tobillos, desde las rodillas, desde los lomos?
Speaker 1:o ya estoy nadando? ¿Estoy conectado a la presencia de Dios? ¿Estoy contento con el nivel que tengo? ¿O anhelo nadar en su presencia? ¿O anhelo nadar en su presencia? ¿Qué cambios debo de hacer para llegar a ese nivel que debe ser mi meta? Hagamos una evaluación honesta. Todos, por lo menos, estamos en los tobichos, ya estamos del otro lado, pero con eso me conformo.
Speaker 1:En los tobichos ya estamos del otro lado, pero con eso me conformo¿ En qué nivel estoy? ¿Qué necesito soltar para fortalecer o para avanzar? ¿Qué necesito? tomemos pasos concretos en esta semana. Pidamosle dirección a Dios.
Speaker 1:El Señor nos quiere anhelar, llevarnos a ese lugar donde podamos nadar en su presencia y disfrutar de todas esas bendiciones que Él ha preparado para nosotros de antemano. Así que en esta semana, empieza a analizar tu vida¿ Dónde estás, con todas las características que yo ya te mencioné. ¿dónde estás? Digo los tobillos. Ya, todos estamos, ya llegamos a las rodillas, a la cintura, o ya estamos nadando. Seamos honestos con el Señor y digamos al Señor quiero avanzar otros mil codos más.
Speaker 1:Señor, no podemos quedarnos todo el tiempo como niños. Yo les decía le compartía, no me acuerdo si aquí o a unas hermanas, que en psicología hay una forma en que se expresa el síntoma de Peter Pan Y Peter Pan. Ustedes han visto la película de Peter Pan y en la segunda película Peter Pan regresa a la ciudad perdida, pero ya es un hombre, pero él se sigue comportando como un niño y se olvida que tiene esposa, hijos. Ya, le anda, ya en su mundo. Pues, así somos muchos cristianos.
Speaker 1:Parecemos Peter Pan, tenemos años y todavía queremos seguir siendo niños Y necesitamos avanzar, necesitamos crecer, necesitamos experimentar todo aquello que Dios ha preparado para nuestras vidas. Así que yo, en esta tarde, yo te invito a que tú reflexiones, a que tú te autoanalices y veas en qué lugar estás, que nos podamos sumergir todo en su presencia, que podamos avanzar. Quizás, recibo, estamos en los tobillos, pero, señor, voy a hacer todo lo que necesito hacer para avanzar a la cordillera, señor, y cuando esté ahí no me voy a conformar, señor, voy a avanzar otros mil codos más, y todo eso me va a llevar un sacrificio, pero es necesario.